Un equipo multidisciplinario de investigadores provenientes de ocho países, se ha dado a la tarea de escudriñar el fondo marino del mediterráneo, para descubrir los secretos que comparten bajos sus aguas comunes, desentrañando varios naufragios que van desde la era romana hasta el siglo XX.
En la zona de Keith Reef las condiciones de la naturaleza hacen que los barcos toquen la superficie del mar, produciendo innumerables naufragios a lo largo de la historia.
Esta es la razón principal por la que los investigadores han concentrado allí sus esfuerzos.
Para realizar este estudio los investigadores utilizaron dos robots submarinos y un sonar multihaz, con los que dieron con seis naufragios de distintas épocas, aunque tres de ellos no se tenía ningún registro.
Gracias a estos instrumentos se lograron recabar numerosas imágenes y videos de los naufragios, como sucedió con tres navíos de la época romana encontrados anteriormente, pero que ahora se vieron en alta resolución.
El objetivo de estos estudios es preservar la memoria del patrimonio submarino, que como señalan los expertos investigadores, es muy vulnerable tanto a la naturaleza como a la mano humana.