A finales del siglo XIII Kublai Khan, envió una expedición a Japón con el fin de conquistarla que contó con 4 mil barcos y cerca de 140 mil hombres, aunque una parte de esta flota sucumbió bajo las aguas por una tormenta.
Intentaron infructuosamente cobijarse de la tormenta en las cercanías de la bahía de Imari, donde recientemente los arqueólogos submarinos habían encontrado numerosas evidencias de este naufragio, como cerámicas o el timón de un barco.
Este año se halló el naufragio completo y varios análisis de sonar indican la presencia de más barcos, por lo que los investigadores japoneses esperan, pronto sacar varios de estos barcos a la luz.