Arqueólogos dieron con un descubrimiento importante al noreste de Irán, específicamente en la región de Oshnavieh, donde hallaron restos arquitectónicos de la cultura Dalma.
De la cultura Dalma se tenían restos de su cerámica encontrada en otras expediciones arqueológicas, en los montes centrales o la región de Zagros, sin embargo, la reciente investigación ha dado con restos de arquitectura permanente, en un período que las edificaciones no poseían este grado de construcción.
El edificio estaba hecha de adobe y en su interior dieron con los restos de una estructura, que parece ser un horno aunque de ser así, sería el primer registro histórico en la zona.
Otro de los hallazgos fueron las diferentes macetas de terracota encontradas en el sitio, realizadas con una técnica de maceta.
Los sedimentos del sitio arqueológico dan cuenta de una datación, de quinto milenio antes de nuestra era, en una zona que es rica en vestigios arqueológicos.