Ha iniciado la segunda fase de excavaciones en el Templo de Augusto en Tarragona, donde los arqueólogos trabajarán en la zona donde estaban las estancias de los sacerdotes, que va desde el siglo XII al XVI, encontrándose numerosos vestigios de cómo era la vida en este reciento durante la época medieval.
El nivel en el que están trabajando los investigadores son los niveles de construcción del muro, lo que aportará a los arqueólogos mayores datos, sobre el período exacto en que se construyó este templo.
Los trabajos se extenderán durante todo el mes de noviembre, con dos objetivos fundamentales, siendo el primero de ellos aumentar el recorrido de la Catedral y el Museo Diocesano.
El otro objetivo es el de formar a nuevos arqueólogos, ya que se están utilizando a estudiantes universitarios junto a profesionales que realizan su Doctorado en arqueología.