Un equipo de investigación bajo la dirección de Metin Erin de la Universidad de Kent y el Museo de Historia Natural de Cleveland, han realizado un estudio donde utilizaron puntas de Clovis en mangos de madera, y lascas de piedras para observar su desempeño en la cacería de un bisonte, percatándose de que las puntas Clovis bien pudieron utilizarse en la caza de animales mayores.
El mayor desempeño lo tuvieron los cazadores con puntas Clovis, en primer lugar, algunos cazadores que tenían lascas de piedras terminaron cortados, además de que podían utilizar las puntas Clovis con mayor facilidad.
A pesar de ello, los investigadores también notaron que las puntas podían romperse con más facilidad que las lascas de piedras, notando a su vez que deben afilarse constantemente para obtener los resultados deseados.
En el presente experimento, los cazadores tomaron 3 horas con 10 minutos para cazar al bisonte.