Las prospecciones arqueológicas en la zona de Palmar de Troya, en Utrera (bajo valle del Guadalquivir), han revelado un yacimiento en la pedanía de La Cañada que conserva la toponimia original romana: la urbs de Siarum, un centro urbano de gran importancia que data de entre los siglos VI y IV antes de Cristo al V después de Cristo.
El actual centro de la ciudad de Utrera, como demuestran las investigaciones sobre el terreno, no debía de tener mucha importancia (a excepción de algunas villas menores y factorías) en comparación con los dos núcleos de Siarum y Salpensa, a las afueras de la ciudad. En el caso del primero, mucha ha sido la incertidumbre histórica que ha rodeado la fantástica ciudad, desde que empezara a ser estudiada por los renacentistas del siglo XVI.
En la actualidad, pocas son las informaciones que tenemos sobre Siarum, que ha sido calificada por su gran importancia como la Troya de Utrera. Las primeras descripciones de la romana Siarum proceden del científico y escritor antiguo Plinio el Viejo, que ya apuntó que la ciudad acuñaba su propia moneda, de ahí que el peso político y económico de la misma fuese considerable.
Además, la especulación de los historiadores ha derivado en teorías que señalan la posible existencia de un teatro romano enterrado bajo este nuevo yacimiento, cuyo valor histórico sería incalculable. El propio Ayuntamiento del municipio de Utrera es consciente de la importancia histórica del yacimiento de Siarum y reclama la pertenencia de este enclave arqueológico al municipio utrerense.
Tal es el valor de los restos encontrados en Siarum que no han sido pocas las intentonas de expoliación, como la que se detectó en septiembre del pasado año cuando dos trabajadores de la zona fueron detenidos mientras utilizaban detectores de metales, acusados de apropiación indebida de objetos arqueológicos como monedas y una piedra de molino.
La Universidad de Sevilla se ha hecho eco de los avances en la prospección arqueológica de Siarum, compendiando toda la información relativa a la urbe romana y sus construcciones públicas y privadas, que además se complementa con descubrimientos en materia de fuentes documentales como los que se desprenden de la interesante Tabula Siarensis, que recoge el procedimiento de honores para el funeral del noble y militar Germánico.
Imagen: imagina65