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La primera parte del siglo XIX fue testigo en el subcontinente americano, del fin de la dominación política – militar española, la cual llevaba 300 años de vigencia, hasta que la invasión bonapartista en España produjo una serie de cambios y levantamientos, tanto en la península ibérica como en el territorio colonizado de América.
Dos frentes de guerra importantes tuvo el subcontinente, el frente del Norte liderado por Simón Bolívar y sus tropas, y el frente del Sur donde la figura del General José de San Martín, fue el artífice absoluto de la independencia de Argentina, Chile y Perú.
Muchos pueden pensar que el ideal político de los libertadores de América era similar, y que todos apoyaban la creación de una república como el mejor de los sistemas políticos para los nacientes Estados de América.
No obstante, la visión de todos ellos se diferenciaba en varios puntos, siendo el General José de San Marín, más cercano a la creación de un gobierno monárquico, a diferencia de Bolívar, quien pensaba más acorde a las repúblicas de antaño.
Vida de José de San Martín
Nació el día 25 de febrero de 1778 en un territorio que había sido una misión de los Jesuitas, Yapeyú, en el que se conocía en aquel entonces, como Virreinato del Rio de la Plata.
Fue hijo del militar español Juan de San Martín y su esposa Gregoria Matorras, siendo el menor de cinco hijos que tuvo la pareja.
Los primeros cinco años de José de San Martín se desarrollaron en este territorio donde su padre ejercía funciones políticas.
No obstante, cuando el pequeño José contaba cinco años, la familia se trasladó a España donde el futuro libertador tendría su educación y comenzaría la carrera militar a los 11 años, teniendo sus primeras acciones militares en 1790.
José de San Martín, militar español
La educación de San Martín en España comprende, según varios historiadores, un paso por el Seminario de Nobles de Madrid.
Sin embargo, no es seguro que lo haya hecho, pero sí está documentado que estudió en la Escuela de Temporalidades de Málaga hasta 1789 cuando, el 9 de julio, es designado Cadete en el Regimiento de Murcia, comenzando así una carrera militar en el ejército español donde ascendería rápidamente.
Entre los servicios militares que tuvo en estos años puede referirse en 1791 en la campaña de Oran, campaña de Rosellón en 1793, Ampurdán en 1795, en 1798 contra los ingleses, en 1801 en la “Guerra de las Naranjas”, entre España y Portugal; para luego tener la destacada actuación en 1808 cuando el ejército napoleónico invadió España, destacándose en Bailén siendo su actuación reconocida en la Gaceta Ministerial de Sevilla.
Los ascensos continuaron en estos años, llegando a ser Teniente Coronel en 1808, ayudante del Marqués de Coupigny en 1810 y agregado de Comandante del Regimiento de Dragones de Sagunto en 1811, año en que culminaría su carrera militar en España para regresar al Rio de la Plata, donde había estallado la revolución, ofreciendo grandes oportunidades a los militares criollos que servían en España.
José de San Martín regresa a Rio de la Plata
Antes de regresar a Rio de la Plata el 9 de marzo de 1812, el futuro libertador tendría una estancia en Londres, donde se ha conjeturado que pudo afiliarse a la masonería, en compañía de otros jóvenes como O`Higgins, siendo asesorados por Francisco de Miranda.
Al parecer, varios de los futuros líderes libertadores tuvieron este paso por Inglaterra reunidos con Miranda, antes de regresar al continente americano.
Al llegar a Buenos Aires en marzo de 1812, se reúne con las familias más importantes de esta ciudad, donde conocería a su esposa María de los Remedios de Escalada, con quien tendría una hija llamada Mercedes Tomasa San Martín de Escalada en 1816.
Durante este período organiza el Regimiento de Granaderos a Caballo, que tendría su primera victoria importante contra las tropas realistas en San Lorenzo, el 3 de febrero de 1813.
En este año, el General Belgrano, se encontraba en el Alto Perú, hoy Bolivia donde tuvo un revés importante, al que San Martín iría a socorrer, fue allí donde vería la imperiosa necesidad de atacar a los realistas en Perú, para acabar con la dominación española en América.
San Martín y el ejército de los Andes
En 1814 San Martín sería gobernador de Cuyo, donde erigiría el plan de pasar por los Andes para liberar el Perú.
Sin embargo, antes de esto debía liberar Chile para tener un paso abierto al territorio peruano, y así, lograr acabar con la influencia política y militar de España en ese territorio.
Para este fin, crearía un ejército de argentinos y chilenos que lograrían independizar Chile y llegar al Perú, a la par de oficiales de otras naciones como franceses e ingleses.
La expedición de los Andes se caracterizó por la confusión generada en el enemigo, ya que fueron varias columnas las que atacarían en diferentes direcciones, ignorando el ejército realista por donde vendría el ataque más importante.
En esta expedición, las huestes de San Martín recorrerían montañas de 5.000 metros de altura, escalando y sufriendo varias penurias, pero logrando penetrar en Chile y venciendo a los realistas en Chacabuco el 12 de febrero de 1817, batalla que comenzaría la Independencia de Chile.
En un Cabildo Abierto sería nombrado Director Supremo de Chile, pero lo rechazaría, nombrando a Bernardo O´Higgins en esta responsabilidad.
San Martín, continuaría luchando y organizando el ejército hasta que el 5 de abril de 1817, en la batalla de Maipú, sellaría la independencia chilena pensando ahora en pasar al Perú.
San Martín en Perú
Al Perú llegaría en 1820, desembarcando en Paracas para liberar este territorio de la influencia realista.
Perú era el virreinato donde se atrincheraba el corazón de toda la fuerza militar española y tanto San Martín como Bolívar entendían que conquistar este territorio significaría el final de la dominación española en América, por ello la importancia que San Martín confirió a este lugar.
En Perú, San Martín tendría varias negociaciones con el virrey Pezuela y luego con José de La Serna, para llegar a un acuerdo de paz, acuerdos que fracasaban y eran utilizados por los realistas para organizar el grueso de su ejército que contaba con 20.000 hombres distribuidos en todo el virreinato.
Sin embargo, cuando se produjo la deserción del Batallón Numancia en 1821 compuesto por venezolanos y neogranadinos, la ciudad de Lima estaba abierta a San Martín, logrando la independencia de este territorio.
El gobierno de San Martín en Perú sería desde el 3 de agosto de 1821 hasta el 20 de septiembre de 1822, dejando creada la Biblioteca Nacional donde donó sus libros, creando leyes y fortaleciendo el Estado.
El final de su carrera política y militar llegaría con la reunión en Guayaquil que sostuvo con Simón Bolívar, donde San Martín le cedió el ejército y continuar con la guerra independentista de América.
José de San Martín, final de la vida pública y muerte
Luego de la salida de la política y vida militar de José de San Martín, volvería a Buenos Aires posterior a la muerte de su esposa en agosto de 1823.
Sin embargo, fue acusado de conspirador y pasaría a Montevideo para luego embarcarse a Europa, volviendo a Buenos Aires en 1829 cuando se desató la guerra civil. No pasaría mucho tiempo en esta ciudad ya que no le animaba la idea de luchar contra sus paisanos.
En Europa sería tutor de los hijos de Alejandro Aguado, antiguo amigo del ejército español ahora convertido en banquero, dedicándose igualmente a la educación de su hija Mercedes. Vivió en Paris hasta 1848, cuando estallaron los sucesos de la Comuna en esta ciudad.
Motivado por los episodios sangrientos de la Comuna de Paris, San Martín se dirigió a Boulogne sur Mer, donde moriría el 17 de agosto de 1850 acompañado de su hija, su yerno y nietos, siendo repatriados sus restos en 1880.
