Cerca de la ciudad de Málaga en territorio español, una campaña de arqueólogos ha encontrado dos nuevos dólmenes en la necrópolis La Lentejuela Teba construidos en el cuarto milenio a.C., aunque se registra uso mil años después de esta datación.
A través de un corredor acordado se podía acceder a la antecámara de la antigua tumba, en las que se enterraba de forma individual o en parejas.
Los investigadores responsables del descubrimiento han utilizado tecnología de punta, para realizar sus hallazgos, desde el escaneo digital a la observación con drones utilizando estudios avanzados de topografía.
Las muestran arqueológicas también se han recabado para determinar dataciones, además de información más precisa de las prácticas funerarias.