La silueta de una mano encontrada en una cueva en Indonesia tiene 40.000 años, lo que demuestra que Europa no fue la cuna del arte como siempre se creyó.
El arqueólogo que descubrió las pinturas de la cueva Chauvet, ha cuestionado que las pinturas de España sean las más antiguas del mundo, recomendando realizar un análisis más profundo antes de afirmarlo.
Nuevos estudios han determinado que las pinturas rupestres de España son las más antiguas del mundo, superando entre 5.000 y 10.000 años a las de la cueva Chauvet en Francia.